El coche es algo que usamos muy frecuentemente, para todo tipo de cosas del día a día, como ir al trabajo, a la compra, planes de ocio, a por los niños al colegio… en definitiva es un elemento muy importante en la vida de toda persona.
Todo esto se complica cuando tenemos una avería. Rompe el equilibrio que tenemos organizado y hay que buscar una solución rápida, para poder disponer de otro medio de transporte que nos cubra nuestra necesidad.
Lo que no tenemos en cuenta, es que muchas veces estas averías las provocamos nosotros mismos con nuestros malos hábitos de conducción. Tener presente estos gestos, hace que podamos evitar el coste económico que generan las averías, y en definitiva poder contar siempre con nuestro vehículo.
A continuación te contamos los gestos de tu conducción, que pueden provocar averías en tu coche:
1.- Usar indebidamente el embrague
Tener siempre pisado el embrague, cuando estamos parados en un semáforo, sin estar en punto muerto, hace que con el paso del tiempo se dañe antes y lo tengamos que cambiar, lo que conlleva una avería importante a nivel económico.
2.- Conducir con la reserva activa
Muchos de los conductores están acostumbrados, a no pasar por la gasolinera hasta que no salta el testigo de la reserva. En ese momento se llena el depósito y no antes. Este hábito es muy malo, ya que se facilita a que lleguen a nuestro motor los posos y las impurezas de la gasolina. Las averías más comunes por esto afectan a los inyectores, bomba de gasolina o filtro de combustible.
3.- Aparcamiento apurando las distancias
Quién no ha escuchado la frase: “Yo aparco al toque”. La chapa, los neumáticos, los amortiguadores o la dirección se pueden dañar si sufrimos un golpe fuerte con el bordillo a la hora de aparcar. Siempre hay que tener cuidado con la distancia con el bordillo y evitar los impactos.
4.- Sobrepasar los badenes
Si los pasamos con velocidad alta, podremos tener averías en nuestros neumáticos, suspensión o caja de cambios y carrocería, en el caso de que el vehículo impacte con el pavimento. Siempre hay que rebasarlos con velocidad moderada, frenando antes de llegar a ellos. También agradecerán esto las personas que vayan viajando con nosotros.
5.- Mantener la mano sobre la palanca de cambios
Es un gesto muy habitual en muchos conductores. Cuando se usan marchas largas, se apoya la mano derecha en la palanca de cambios. Las averías que genera esta acción, son principalmente desajustes en nuestra caja de cambios, o incluso desequilibrios importantes que lleven consigo cambiar parte de la caja.
6.- No cumplir con el mantenimiento
El mantenimiento de nuestro vehículo es uno de los puntos más importantes. Para evitar averías mecánicas, hay que revisar presión de neumáticos, niveles, frenos o filtros. Hacer caso omiso a esto, hará que se vea afectada nuestra seguridad.